¿Alguna vez has escuchado hablar del calostro bovino? Se trata de un alimento que muchos profesionales de la salud han comenzado a llamar “el oro líquido”, que hasta los últimos años, había sido uno de los secretos mejor guardados de la
naturaleza, sobre todo si se trata de fortalecer el sistema inmunológico.
El calostro es la primera leche que producimos los mamíferos (sí, incluyéndonos también los humanos), después del parto, esta contiene una poderosa mezcla de nutrientes, diseñada para proteger al recién nacido en sus primeros días de vida.
Pero en esta ocasión, nos enfocaremos específicamente en el calostro bovino, un alimento rico en anticuerpos IGg’s (también llamados inmunoglobulinas) y proteínas como las citocinas, que ayudan a combatir virus, bacterias y parásitos.
También contiene nutrientes como vitaminas, minerales y compuestos con efecto antiinflamatorio (lactoferrina). En pocas palabras: es como una bomba natural de defensas para el cuerpo.
Pero lo sorprendente es que los beneficios de esta “primera leche” de la vaca (bovino), no se limitan solo a los terneros (vacas bebé), sino también a cualquier persona que lo consuma, en las dosis recomendadas según las necesidades individuales, formulado bajo todas las normas sanitarias y regulado por instituciones como la COFEPRIS en México.
Este “superalimento” se encuentra disponible en suplementos en polvo o cápsulas y se debe obtener de vacas sanas, alimentadas adecuadamente y que ya han producido lo suficiente para sus crías.
Estudios científicos han mostrado que el calostro bovino puede ayudar a fortalecer el sistema inmune en personas de todas las edades, mejorando la respuesta del cuerpo ante infecciones respiratorias y digestivas, acelerando la recuperación después de hacer ejercicio intenso, e incluso, beneficiando a quienes tienen un sistema inmune debilitado por el estrés o determinadas enfermedades y alergias.
Además, se ha observado que sus componentes ayudan a proteger el intestino, y al tener un intestino sano, también mejoramos nuestras defensas y nuestra capacidad para absorber nutrientes.
El calostro bovino es rico en:
● Inmunoglobulinas (principalmente IgG): Anticuerpos que combaten virus, bacterias y toxinas.
● Lactoferrina: Proteína con propiedades antimicrobianas y antiinflamatorias.
● Citoquinas: Moléculas que regulan la respuesta inmunitaria.
● Factores de crecimiento (IGF-1, TGF-β): Estimulan la reparación y el desarrollo de tejidos.
● Vitaminas (A, E, B12) y minerales (zinc, selenio): Esenciales para la función inmunológica y antioxidante.
En resumen, es un regalo natural cargado de defensas, ideal para quienes buscan fortalecer su salud desde lo más esencial: el sistema inmune. Definitivamente, la naturaleza sabe lo que hace y la ciencia la complementa de manera perfecta.
Referencias:
https://www.bannerhealth.com/es/healthcareblog/teach-me/the-benefits-of-colostrum-for-babies-and-adults
https://pmc-ncbi-nlm-nih-gov.translate.goog/articles/PMC8402036/?_x_tr_sl=en&_x_t r_tl=es&_x_tr_hl=es&_x_tr_pto=tc
https://health-clevelandclinic-org.translate.goog/bovine-colostrum?_x_tr_sl=en&_x_tr _tl=es&_x_tr_hl=es&_x_tr_pto=tc&_x_tr_hist=true
